Cuando hablamos de “tejas de fibrocemento” rápidamente acude a la mente una señal de peligro. Y es normal. Durante sesenta años, has la entrada en vigor de la normativa que prohibía definitivamente el uso del amianto, el fibrocemento había sido conformado justamente con la combinación de cemento y amianto, lo que lo convertía en un material cancerígeno muy peligroso para la salud de las personas. El panorama ha cambiado. Ahora el fibrocemento no puede llevar ni un miligramo de amianto. Pero siguen habiendo tejas de fibrocemento.
Qué función tienen las tejas de fibrocemento sin amianto
¿Que cómo es posible? Pues porque las empresas siempre innovan cuando se encuentran en la necesidad de hacerlo. Y la prohibición del uso y comercialización del amianto en el año 2001 les obligó a encontrar otros materiales alternativos que le proporcionaran las mismas prestaciones y las mismas soluciones. Uno de esos materiales fueron las tejas de fibrocemento sin amianto, fabricadas a partir de una mezcla de cemento con fibras orgánicas o sintéticas completamente inocuas. Es decir, que no representan amenaza para las personas.
Características de este elemento
Y rápidamente las ventajas de las tejas de fibrocemento sin amianto hicieron olvidar las ventajas de las tejas de fibrocemento con amianto. Ocurrió sin más. Y no es de extrañar en cierto sentido. Después de todo, hablamos de tejas que ofrecen una grandísima durabilidad, que aguantan temperaturas extremas, que son impermeables, que presentan una intensa resistencia a la oxidación, que son incombustibles y que son inmunes a las plagas. En otras palabras: todo lo bueno de las tejas de asbesto pero sin provocar ningún tipo de enfermedad.
Modelos que se venden en el mercado
El mercado siempre encuentra la manera de diversificarse. Y en el caso de las tejas de fibrocemento no hay excepción: existen muchos modelos diferentes. No obstante, todos ellos pueden aglutinarse en dos grandes categorías. Por un lado, las tejas de fibrocemento sin amianto onduladas de gran onda. Por otro lado, las tejas de fibrocemento sin amianto onduladas de onda estándar.
Tipos de usos en la construcción
No hay que ser muy imaginativos para localizar los usos de las tejas de fibrocemento. Después de todo, son tejas, lo que implica que son utilizadas para proteger los techos de las viviendas. Una de las ventajas de estas tejas es que suelen presentar un color rojo que hace que el conjunto parezca un clásico techo de tejas convencional. En otras palabras: proporcionan mucha estética.
Ventajas de este tipo de tejados
Las ventajas de colocar tejas de fibrocemento incluyen una menor probabilidad de goteras, un mayor aislamiento sonoro, un mayor aislamiento térmico, una menor deformación en el tiempo, una mayor resisstencia a los impactos, una menor acumulación de humedad provocada por condensación, una gran protección ante las termitas y otros insectos, una instalación cómoda y un gasto reducido.
Cuánto tiempo duran en buen estado
No existe una referencia universal de la durabilidad de las tejas de fibrocemento sin amianto. No obstante, es mucho más extensa que la durabilidad que tenían las estructuras con asbesto, que rondaban los 25 años.
Cómo colocar las tejas de fibrocemento
Para instalar tejas de fibrocemento se requieren dos ingredientes fundamentales:
Material necesario
Primero, el material, que incluye tornillos de techo, fieltro asfáltico, martillo, sierra circular y taladro eléctrico. Es importante que lo dejes en manos de profesionales que garanticen una instalación segura.
Método de instalación
El método consiste básicamente en la adhesión de las tejas al techo mediante los tornillos. Todo lo demás son herramientas orientadas a conseguir eso. Y recuerda: una buena instalación puede evitarte muchas reparaciones futuras.