Una de las principales preocupaciones de las personas no especializadas en la uralita es dilucidar cuándo se convierte en una verdadera amenaza para su salud. Después de todo, la uralita no siempre genera daños a nuestro organismo, motivo por el cual la normativa actual no exige la retirada obligatoria de la misma en todos los casos, sino en algunos muy concretos. En este artículo vamos a profundizar en este asunto. De esta manera podrás protegerte adecuadamente y de manera proporcional de sus posibles efectos.
Uralita cuando es peligrosa
En nuestro otro artículo titulado Cómo saber si mi uralita tiene asbesto descubrimos que no toda uralita contiene amianto o asbesto, ese mineral metamórfico fibroso tan perjudicial para la salud humana. Por esto, el primer paso para determinar si una uralita es peligrosa pasa por averiguar si posee amianto. Eso no debe ser realizado por particulares dado que la manipulación de amianto por personas no profesionalizadas está considerado un delito. Debemos ser las empresas profesionales quienes inspeccionemos el material.
De esa manera determinaremos si la uralita instalada en tu domicilio contiene asbesto o no. En caso de que no, y esté fabricada con fibras de PVC o de vidrio, puede quedarse donde está sin ningún riesgo. Son uralitas relativamente nuevas que producen cero efectos dañinos en el organismo. ¡Has tenido mucha suerte! ¿Pero qué ocurre con la uralita que sí contiene amianto? ¿Cuándo es peligrosa esa uralita? Acompáñanos hasta el siguiente apartado porque vamos a explicártelo todo en detalle.
Cuándo es peligrosa la uralita para la salud de las personas
La uralita, lo recordaréis si leísteis aquel otro artículo, es una mezcla de cemento con fibras. Como ya hemos apuntado antes, esas fibras pueden ser de plástico, de vidrio o de amianto. Y, en ese sentido, mientras que la fibra se encuentre amalgamada con el cemento resulta completamente inofensiva para la salud humana. Esa es la razón por la que la normativa dedicada a la retirada de uralita con amianto no obliga a proceder con su retirada. ¿Cuándo es peligrosa la uralita? Cuando comienza a deteriorarse.
Porque cuando la uralita empieza a perder integridad, las fibras de amianto se separan del cemento y flotan en el ambiente. Es entonces cuando las personas cercanas a dicha uralita comienzan a inhalar poco a poco la menor o mayor cantidad de micropartículas que esté desprendiéndose. Unas partículas biopersistentes y muy nocivas. Hasta tal punto que, cuando es peligrosa la uralita, es capaz de provocar enfermedades tan graves como el cáncer de pulmón o el cáncer de pleura. Debemos protegernos.
Cuándo es peligrosa la uralita con amianto
¿Pero cómo hacerlo? Lo primero es muy importante y ya lo apuntamos antes. Siempre que sospechemos de la presencia de uralita con amianto en algún lugar de nuestra vivienda (el techo, la pared, el suelo, tuberías, cañerías o bajantes) debemos contactar con una empresa especializada para que determinen de una forma profesional si efectivamente se trata de uralita con amianto. Además, esta misma empresa analizará en qué estado se encuentra. Cuando la uralita es peligrosa se encargarán de retirarla.
Lo será, como mencionamos antes, cuando se encuentre deteriorada, pero también cuando haya alcanzado el final de su vida útil. En líneas generales, y en función del tipo de amianto concreto, esa vida útil está entre los quince y los treinta y cinco años. En dichas ocasiones será obligatorio por ley proceder con la retirada de la uralita con amianto. ¿Necesitas ayuda? Nosotros somos especialistas y sabemos cuándo es peligrosa la uralita. Llámanos y nos encargaremos de todo. Siempre a tu disposición.