Amianto es una palabra utilizada para designar a seis variedades distintos de minerales fibrosos, los cuales han sido empleados durante décadas para conformar toda clase de estructuras y productos comerciales. En todo ese tiempo, miles y miles de personas, especialmente aquellas dedicadas a su recolección en minas y la fabricación de los productos con amianto, se han visto seriamente afectadas por la toxicidad de las distintas versiones del amianto. ¿Pero cuáles son los peligros del amianto exactamente?
Peligros del amianto
Los peligros del amianto provienen de sus fibras. Algunos de ellos poseen fibras muy finas y con puntas de carácter puntiagudo que son inhaladas muy fácilmente por los pulmones humanos. Otras cuentan con unas puntas más redondeadas y son inhaladas con menor facilidad, pero aún así inhaladas. Todas estas fibras, las puntiagudas y las redondas, cuentan con una gran biopersistencia, es decir, aguantan mucho tiempo en los pulmones, lo que les permite provocar graves daños a sus tejidos.
Los riesgos del amianto
¿Qué daños? Los más habituales son las fibrosis que, en el caso del amianto como fuente de la misma, suele conocerse como asbestosis. Es una afección crónica que afecta a la salud de los pulmones y del organismo y, en ocasiones, puede derivar en afecciones aún más graves. Además, la inhalación continuada de partículas de amianto puede provocar enfermedades mucho más graves como el cáncer de pulmón o el mesotelioma pleural, ambos capaces de producir la muerte. Los riesgos son reales.
Conocer los peligros del amianto
En ese sentido, conocer los peligros del amianto resulta fundamental para tener una actitud cautelosa. En los últimos años, y gracias al trabajo de las organizaciones médicas y los medios de comunicación, existe un nivel de conciencia mucho mayor acerca de los potenciales riesgos del amianto en la salud humana. Pero en las décadas anteriores no era así. Hasta tal punto que muchas personas manipulaban amianto, algo que hoy en día está prohibido. Solos los profesionales autorizados podemos hacerlo.
Por qué es peligroso el amianto
Como hemos indicado antes, los riesgos del amianto proceden de las características de sus fibras, que son lo suficientemente pequeña para poder ser inhaladas. En líneas generales, la inhalación de unas pocas fibras no suele provocar daños, pero la inhalación persistente de las mismas sí. Muchas afecciones derivadas de la inhalación aparecen años o décadas después. Debemos protegernos ahora.
Cómo evitar los riesgos del amianto
Para evitar los riesgos del amianto debemos primeramente conocer de su presencia. Para esto es clave una pequeña investigación sobre los materiales utilizados en la construcción del inmueble. Podemos consultar a la empresa constructora directamente. En caso de no poseer esa información, solo queda estar muy atentos y, a la mínima sospecho de amianto, contactar con profesionales como nosotros.
Protección frente al amianto
Nosotros nos encargaremos de analizar el material sospechoso y determinar si se trata efectivamente de un material con amianto o no. En caso afirmativo, debemos evaluar las condiciones en que se encuentra, puesto que la normativa vigente determina que en caso de encontrarse en buen estado podemos impermeabilizar la uralita en lugar de retirarla. Nosotros te asesoraremos personalmente.
Seguridad al trabajar con amianto
En otros casos, cuando la uralita se encuentre deteriorada y el amianto esté liberado, no quedará otra más que eliminarlo. Para ello, en nuestra empresa trabajamos con los mejores equipos de seguridad del mercado y los mejores medios técnicos. Sabemos cuáles son los peligros del amianto y protegemos a los expertos a base de protocolo, medidas de seguridad avanzadas y concienciación.