Para retirar uralita necesitamos elaborar una estrategia personalizada que tenga en cuenta dos aspectos. En un lado, las estipulaciones establecidas en las normativas vigentes en nuestro país. En otro lado, los factores y las circunstancias propias de cada escenario. Al fin y al cabo, no existen dos intervenciones de retirada del amianto que sean idénticas. Los profesionales de empresas autorizas, los únicos legitimados para realizar el procedimiento, sabemos cómo retirar la uralita de manera eficiente y segura.
Razones para quitar la uralita
Hace mucho tiempo que la comunidad científica conoce las consecuencias de la exposición al amianto. Para ser más exactos, los efectos que provocan las microfibras delgadas y biopersistentes del amianto una vez se inhalan y penetran en los pulmones. Entre otras cosas, esta contaminación puede desembocar, décadas más tarde, en el surgimiento de enfermedades como la asbestosis crónica, el mesotelioma pleural o el cáncer de pulmón. Son razones para quitar la uralita más que suficientes. ¿No crees?
Además, no se trata únicamente de nuestra propia salud y la de las personas que visitan nuestra vivienda. El amianto puede viajar por diferentes ambientes gracias al viento y, además, las micropartículas del mismo se adhieren a la ropa de las personas. En definitiva, una únicamente de amianto puede exponer a muchísimas personas a las fibras del mineral. Por eso debemos actuar de inmediato. Tan pronto como sospeches de un material contacta con nosotros. Tenemos los conocimientos y los medios.
Cuándo retirar la uralita
Nuestra normativa referente al amianto es bastante clara a este respecto: el amianto tiene que ser retirado y trasladado a un vertedero de amianto autorizado cuando se encuentra deteriorado. Esto puede ocurrir por determinadas condiciones ambientales o simplemente por el paso del tiempo. En ese sentido, si una uralita con amianto ha alcanzado su vida completa útil, cifrada en unos 25 años, también debe ser eliminado. En ningún momento es tan peligroso el amianto como cuando está en mal estado.
Quién puede quitar uralita
Pero que no cunda el pánico. Te hemos explicado cuándo retirar la uralita pero queda otra pregunta esencial en juego: ¿quién puede quitar la uralita? Como ya anticipamos al principio de este post es un procedimiento que solo pueden realizar legalmente los profesionales de las empresas inscritas en el RERA (Registro de Empresas con Riesgo de Amianto). Empresas que cuentan con profesionales formados mediante cursos de amianto del RERA, con medios técnicos avanzados y con equipos de seguridad.
Cómo retirar la uralita de una tejado
Nuestro procedimiento profesional es muy estricto. En primer lugar, analizamos químicamente el material y confirmamos que se trata de amianto. Luego valoramos su estado de conservación. En base a estos datos, el tipo de amianto que es (puede ser crocidolita, tremolita, crisotilo y hasta otras tres variedades más) y todas las circunstancias propias del entorno, elaboramos un plan de retirada. Posteriormente transportamos el residuo hasta un vertedero autorizado e instalamos uralita sin amianto de sustitución.
Cuánto cuesta quitar la uralita
El precio de quitar la uralita varía enormemente en función de determinadas condiciones. No obstante, para tener una referencia, la media suele estar en unos diez euros la retirada de un metro de cuadrado de tejados de naves industriales y en unos veinticinco euros la retirada de un metro cuadrado de estructuras de uralita con amianto en las viviendas y otros pequeños inmuebles. Además, ten en cuenta que existen subvenciones estatales, autonómicas y locales que pueden abaratar considerablemente los costes.