Durante décadas, el fibrocemento en construcción fue uno de los materiales estrella en el mundo de la edificación. Económico, resistente, fácil de instalar… y, por desgracia, altamente peligroso cuando contenía amianto. Aunque hoy su uso está totalmente prohibido si lleva asbesto, aún hay miles de edificios en España que lo conservan. En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber sobre el fibrocemento en construcción, sus usos pasados, los riesgos que implica, su normativa y cómo se puede sustituir hoy en día sin comprometer tu salud ni la de quienes te rodean.
Tabla de contenidos
¿Qué es exactamente el fibrocemento en construcción?
El fibrocemento es un material compuesto por cemento, agua y fibras que mejoran su resistencia. Durante mucho tiempo, esas fibras eran de amianto o asbesto, lo que dio lugar al temido fibrocemento en construcción con amianto.
Este tipo de fibrocemento fue muy utilizado entre los años 60 y 90 para fabricar:
- Tejados y cubiertas onduladas (la famosa uralita).
- Bajantes de agua pluvial y fecal.
- Canalones y depósitos de agua.
- Revestimientos de fachadas y techos interiores.
- Placas de separación en naves industriales o garajes.
Su uso estaba tan extendido que, hoy día, sigue presente en muchísimos edificios construidos antes de 2002.
Principales usos del fibrocemento en construcción
Veamos con más detalle como se usaba el fibrocemento en construcción y estructuras se usaba este material:
Cubiertas y tejados
El clásico uso de la uralita ondulada. Era barata, resistente a la intemperie y fácil de instalar. Se colocaba en viviendas, almacenes, casetas, invernaderos, etc.
Bajantes y canalizaciones
Los tubos de fibrocemento eran muy habituales en desagües de comunidades de vecinos, sobre todo en edificios de los años 70 y 80.
Depósitos de agua
Muchas viviendas unifamiliares y bloques de pisos antiguos aún conservan depósitos de fibrocemento con amianto para almacenar agua potable o de riego.
Revestimientos interiores
En falsos techos, tabiques finos o placas decorativas, se instalaban láminas de fibrocemento por su resistencia al fuego y su aislamiento térmico.
¿Por qué es peligroso el fibrocemento con amianto?
Mientras está en buen estado, el fibrocemento en construcción con amianto no representa un riesgo inmediato. El problema llega cuando se rompe, deteriora o manipula, porque libera fibras invisibles que, al inhalarse, pueden acumularse en los pulmones.
Los riesgos del fibrocemento deteriorado incluyen:
- Asbestosis.
- Cáncer de pulmón.
- Mesotelioma pleural.
- Fibrosis pulmonar.
Además, el polvo con partículas de asbesto puede contaminar el ambiente y afectar a personas incluso sin estar en contacto directo con el material.
Normativa actual sobre el fibrocemento en construcción
En España, el uso de fibrocemento en construcción con amianto está totalmente prohibido desde 2002. Sin embargo, su retirada no es obligatoria… a menos que:
- Esté deteriorado o represente un riesgo.
- Se vaya a hacer una reforma o demolición.
- Lo indique una inspección técnica del edificio.
- Lo exijan las normativas locales de seguridad y salud.
La normativa sobre fibrocemento establece que:
- Solo empresas registradas en el RERA (Registro de Empresas con Riesgo de Amianto) pueden retirarlo.
- Debe presentarse un plan de trabajo aprobado por la autoridad laboral.
- El material debe tratarse como residuo peligroso y gestionarse en un vertedero autorizado.
¿Cómo se realiza la sustitución de fibrocemento?
La sustitución de fibrocemento no se puede improvisar. Se trata de un proceso delicado y técnico que debe seguir un protocolo específico para garantizar la seguridad de todos los implicados.
Inspección inicial
Se identifica el material, se toma muestra (si es necesario) y se confirma la presencia de amianto.
Plan de trabajo
Se elabora un documento detallado con los procedimientos de retirada, seguridad, protección y gestión de residuos.
Preparación de la zona
Se delimita el área, se señaliza, se instala una zona de descontaminación y se prepara el entorno.
Retirada del fibrocemento
Se desmontan las placas o conductos con cuidado, evitando su rotura. El personal va equipado con EPI (traje, mascarilla con filtro P3, guantes…).
Embalaje y transporte
Todo se embala en sacos especiales, se etiqueta y se transporta a un gestor autorizado de residuos peligrosos.
Limpieza y certificado
Se limpia la zona con aspiradores con filtros HEPA y se emite el certificado de retirada conforme a la normativa.
¿Qué materiales se usan hoy para sustituir el fibrocemento?
A día de hoy, existen muchas alternativas seguras y eficaces para sustituir el fibrocemento en construcción:
- Paneles de policarbonato para cubiertas ligeras.
- Placas de fibrocemento sin amianto (homologadas y seguras).
- Chapas metálicas galvanizadas o lacadas.
- Tuberías de PVC o polietileno para bajantes y canalizaciones.
- Depósitos de polietileno o acero inoxidable.
Nosotros siempre recomendamos materiales resistentes, con buena durabilidad y bajo mantenimiento, adaptados a cada necesidad.
¿Por qué es importante una gestión adecuada de residuos con amianto?
Uno de los errores más graves que vemos es tirar el fibrocemento retirado en escombros convencionales o contenedores sin control. Esto no solo es ilegal, sino que expone a otros al riesgo de contaminación.
La gestión de residuos con amianto debe hacerse así:
- Embalado hermético con doble bolsa o saco.
- Etiquetado según la normativa de residuos peligrosos.
- Transporte con empresa autorizada.
- Deposición en vertederos que acepten amianto.
¿Cuándo deberías contactar con una empresa especializada?
Te recomendamos ponerte en contacto con un profesional si te encuentras en las siguientes situaciones.
Vas a reformar un edificio anterior al año 2002.
Antes de iniciar obras, es imprescindible comprobar si hay materiales de fibrocemento en construcción que puedan liberarse durante la demolición. Actuar sin inspección previa puede poner en riesgo a operarios y vecinos.
Quieres vender o alquilar y te han pedido informe de amianto.
Cada vez es más común que compradores, inquilinos o notarios soliciten un informe técnico sobre la presencia de amianto. Nosotros te ayudamos a verificarlo y entregarte el documento oficial.
Has detectado material sospechoso en mal estado.
Si observas grietas, polvo o fragmentos en bajantes, tejados o placas antiguas, es posible que contengan amianto friable. En ese caso, conviene intervenir cuanto antes para evitar la exposición.
Quieres revalorizar tu propiedad eliminando riesgos.
Eliminar materiales con amianto mejora la seguridad, el valor de mercado y la confianza de futuros compradores. Una vivienda sin fibrocemento con amianto es más atractiva y segura.
Quieres cumplir con la normativa sin complicaciones.
La retirada de amianto está regulada por ley y requiere una empresa inscrita en el RERA. Nos encargamos de todo el papeleo, los permisos y el tratamiento de residuos, sin que tú tengas que preocuparte.
Eliminar el fibrocemento es apostar por salud y tranquilidad
Como has visto, el fibrocemento en construcción, cuando contiene amianto, es un enemigo silencioso. No da señales hasta que es demasiado tarde. Pero tú puedes actuar ahora, con información, responsabilidad y el respaldo de profesionales.
En nuestra empresa, nos encargamos de la retirada de uralita, y te ofrecemos la retirada legal, segura y rápida del fibrocemento en cualquier edificio, instalación o comunidad. Llevamos años haciéndolo y sabemos cómo hacerlo bien, sin sustos ni complicaciones.
¿Tienes dudas sobre si hay amianto en tu tejado, bajante o depósito? ¿Vas a reformar y no sabes por dónde empezar? Llámanos o escríbenos. Te asesoramos sin compromiso y nos encargamos de todo.
Porque quitar el fibrocemento es más que una reforma. Es cuidar tu salud y la de quienes te rodean.